Su historia comienza con la visión de hacer de la arquitectura una herramienta de cercanía y transformación, apostando por modelos de vivienda e intervenciones que mejoren la calidad de vida y fortalezcan el tejido comunitario. Obras como Casa Granada —una vivienda unifamiliar diseñada para adaptarse a programas diversos—, Centro 16-56 y Centro 135 muestran su compromiso por reinterpretar la normativa, promover el reúso de estructuras existentes y abrir nuevas posibilidades de habitar.

Con sede en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, Grado Studio refleja en cada proyecto su filosofía de accesibilidad, creatividad y respeto por el entorno natural. Su práctica no solo se centra en el diseño arquitectónico, sino también en la creación de espacios significativos que inspiran y fomentan la colaboración.

Su trabajo ha sido reconocido con la Medalla de Plata en la 12ª Bienal de Arquitectura Chiapaneca y la Medalla de Oro en la 13ª edición, esta última por el proyecto Sabines 242. Además, son impulsores de Provincia, el primer festival de arquitectura y ciudad en Tuxtla, concebido como un espacio de diálogo y reflexión que posiciona a Grado Studio como un referente en la construcción de ciudades más justas e inclusivas.